El proyecto
TeRn está dirigido a construir, probar, demostrar y establecer un sistema de seguimiento permanente en relación con posibles desastres volcánicos, mediante el uso del radón – un gas radiactivo que aparece en la naturaleza en concentraciones muy pequeñas – que se puede utilizar como trazador para seguir el transporte de gases de origen profundo en el interior de un edificio o estructura volcánica.El objetivo general es el desarrollar e instalar una red experimental de seguimiento geoquímico en la superficie y en el subsuelo de Tenerife, basada en una configuración tridimensional (3D) de sensores de radón y parámetros asociados, y estudiar su aplicabilidad como prototipo de red para el seguimiento y vigilancia a largo plazo, a la vez que constituiría un laboratorio natural para el desarrollo de otros programas de seguimiento o investigaciones relacionadas con este campo en el ámbito de la comunidad europea.
La puesta en marcha de esta red para el seguimiento y el estudio del flujo de radón puede ser de utilidad en la mitigación del riesgo volcánico y como complemento de otros sistemas de seguimiento multiparamétricos.
Dependiendo de la evaluación de los resultados obtenidos, este prototipo de red 3D y la metodología de trabajo desarrollada, se podría aplicar a otros contextos geológicamente activos (volcánicos y/o geodinámicos)
Objetivos concretos
Instalar una red de seguimiento de radón y otras variables (otros gases, variables ambientales) con una configuración 3D, dotada de sistemas de control remoto y de recogida de datos automática, así como un laboratorio central de recogida y almacenamiento de datos en Tenerife. La red cubrirá una extensión total de unos 50 km2 y tendrá una dimensión vertical de unos 3 km.
Desarrollar una metodología adecuada para el análisis de los datos obtenidos con dicha configuración 3D.
Evaluar los resultados del seguimiento como prototipo de red 3D para la vigilancia de la actividad volcánica en Tenerife, y su aplicabilidad en otros contextos geológicamente activos.
Al final del proyecto se mejorará y optimizará la red para su posterior uso, no sólo como herramienta para vigilancia volcánica en Tenerife, sino también como laboratorio natural en el que se podrán desarrollar programas de seguimiento paralelos y otras investigaciones relacionadas con este campo.